El Buttermilk o Suero de Leche nos lo piden en algunas de las recetas que usamos, es un ingrediente el cual a veces nos es complicado conseguirlo y es muy fácil de hacer uno casero, así que por qué no hacerlo en el momento que lo vayamos a necesitar y lograr que nuestros pasteles salgan mucho mejor.
¿Qué es Buttermilk o Suero de Leche?
El buttermilk es simplemente un suero de leche que sobra cuando se prepara mantequilla de forma tradicional y que se obtiene añadiendo bacterias de ácido láctico a la leche.
¿Cuál es el Uso del Buttermilk en las Recetas?
Es un ingrediente muy importante en la repostería. Provoca que los productos horneados sean más esponjosos, ligeros y suaves ya que reacciona con el bicarbonato de sodio al hornear.
Usar buttermilk en la elaboración de panecillos, pasteles y galletas aporta un increíble sabor y da a la masa una esponjosidad especial.
Es un clásico en los desayunos norteamericanos al ser un ingrediente habitual de sus famosos pancakes. Y en los deliciosos helados que se consiguen utilizando el buttermilk en su elaboración.
También se usa en la cocina salada para marinar carnes, para hacer salsas espesas de queso, dá un ligero toque ácido y un delicioso sabor.
¿Cómo se Prepara un Buttermilk o Suero de Leche Casero?
Es muy fácil prepararlo en casa y solamente necesitamos 2 ingredientes: leche y limón, combinar el limón con la leche, dejarlos reposar y después de unos minutos parecerá leche cortada pero se habrá convertido en un buttermilk casero.
Se puede usar leche entera, leche semi desnatada y leche sin lactosa, cualquier tipo de leche funciona.
Ingredientes:
- 1 taza (250 ml.) de leche
- 1 cucharada (15 ml.) de jugo de limón
Preparación:
- En un recipiente ponemos la leche.
- Agregamos el jugo de limón.
- Revolvemos muy bien.
- Dejamos reposar por unos 10-15 minutos o hasta que se corte totalmente la leche.
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